La forma de afrontar un proyecto de interiorismo depende en gran medida del uso del espacio. Una residencia privada precisará de largas conversaciones para entender las necesidades y forma de vida de sus ocupantes, un restaurante deberá tener en cuenta la diversidad de la clientela para atraer al máximo número de comensales, y una oficina requerirá un análisis combinado de los valores de la empresa y la interacción entre los distintos departamentos para aunar representatividad y eficiencia.
En cualquier caso, sea cual sea la función, el resultado será una experiencia personalizada a medida de las necesidades y aspiraciones de cada cliente. De esta forma, la puerta de entrada se convierte en un portal espacio-temporal que da acceso a un microcosmos perfectamente orquestado para el deleite de los usuarios.
En este proceso creativo, tan complejo como apasionante, el “concept” tiene una importancia capital. En él se reúne todo lo aprendido de las investigaciones previas y se añaden las ideas que generan un proyecto de alto impacto tanto a nivel sensorial como de utilización. Éste se desarrolla por medio de “moodboards” y diagramas que, conjuntamente, colaboran a construir ese espacio deseado.
La garantía de OL viene dada por nuestro compromiso con la realidad, siempre tozuda, atendiendo a sus bases profundas con una mirada limpia y desprejuiciada. Este acercamiento nos permite evitar la superficialidad de los lugares comunes y proporcionar soluciones innovadoras e inesperadas para cada proyecto.